Arquitectura Neoclásica: Un Eco del Pasado en lo Moderno
11/04/2025 l Interés General
Explorando las diferencias entre la arquitectura neoclásica y la moderna en el contexto de Mercosur.
La arquitectura neoclásica, que emergió a finales del siglo XVIII, se caracteriza por su retorno a los principios estéticos y filosóficos de la Antigua Grecia y Roma. Este estilo se manifiesta a través de columnas, frontones y una simetría rigurosa que evoca la grandeza clásica. En contraste, la arquitectura moderna, que se desarrolló principalmente en el siglo XX, se distancia de ornamentaciones y busca la funcionalidad, utilizando materiales contemporáneos como el acero y el vidrio. En Mercosur, el legado neoclásico se observa en edificios emblemáticos de Buenos Aires y Montevideo, donde un 30% de las construcciones aún preservan elementos de este estilo, según un estudio de la Universidad de La Plata. Sin embargo, la creciente preferencia por diseños minimalistas y sostenibles plantea cuestionamientos sobre el futuro del neoclasicismo en la región.

La relevancia de la arquitectura moderna en la infraestructura actual, en comparación con la neoclásica, se evidenció en la última década, donde el 70% de las nuevas obras en países del Mercosur, como Brasil y Paraguay, se inclinan hacia planteamientos modernos y ecoeficientes. En este contexto, la tendencia hacia la sostenibilidad y la eficiencia energética se vuelve cada vez más crítica, lo que podría relegar a la arquitectura neoclásica a un papel secundario en el futuro. A medida que las ciudades de Mercosur evolucionan, el debate sobre la preservación del patrimonio arquitectónico versus la innovación en diseño se intensifica, sugiriendo que la infraestructura del mañana podría ser una amalgama de lo antiguo y lo nuevo, siempre en búsqueda de la funcionalidad sin perder la esencia cultural.